300 g de boquerones limpios
Harina para empanizar
Sal y pimienta al gusto
Aceite de oliva virgen extra para freír
Limón (opcional, para servir)
Elaboración
Prepara los boquerones limpios y sécalos bien con papel de cocina.
En un plato hondo o un bol de buen tamaño, pon harina abundante.
Pasa los boquerones ya secos por la harina, asegurándote de que estén completamente cubiertos por igual. Sacúdelos un poco para eliminar el exceso de harina o que se formen grumos en alguna parte, la capa de harina debe ser fina.
Calienta abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén grande a fuego medio-alto.
Una vez que el aceite esté caliente, coloca los boquerones empanizados en la sartén, cuidando de no amontonarlos.
Fríe los boquerones por ambos lados hasta que estén dorados y crujientes, entre 1 y 2 minutos dependiendo del tamaño del pescado.
Una vez fritos, retira los boquerones de la sartén y colócalos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
Sirve los boquerones fritos bien calientes con rodajas de limón, si lo deseas, y a disfrutar!!
boquerones limpios
Cómo limpiar bien los boquerones
Limpiar los boquerones adecuadamente es crucial para garantizar su frescura y sabor en la preparación final. Aquí tienes una guía paso a paso para limpiar los boquerones:
Lavado inicial: Coloca los boquerones en un recipiente con agua fría y un chorrito de vinagre blanco. Esto ayuda a eliminar cualquier impureza superficial y a desinfectar el pescado. Deja reposar durante unos minutos y luego escúrrelos.
Eliminación de las cabezas y las vísceras: Con un cuchillo afilado, corta las cabezas de los boquerones. Luego, con un corte longitudinal desde la cabeza hasta la cola, abre los boquerones y retira las vísceras con cuidado. Este paso también te permitirá quitar la espina central. También puedes dejar las cabezas y eliminar solo las vísceras pero te recomendamos que las alimines porque podrás comer el boquerón entero y además evitarás los riesgos del anisakis.
Enjuague final: Después de quitar las cabezas y las vísceras, enjuaga los boquerones bajo agua fría corriente para asegurarte de que estén completamente limpios.
Secado: Coloca los boquerones limpios sobre papel de cocina y sécalos suavemente para eliminar el exceso de humedad. Es importante que estén lo más secos posible antes de cocinarlos, ya que el exceso de humedad puede afectar la textura y el sabor.
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