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Pizza casera, después de que aprendí dejé de comprar pizza

  1. Preparar la masa:
    • En un bol grande, mezcla la harina, la sal y el azúcar.
    • Disuelve la levadura en el agua tibia y déjala reposar durante 5 minutos.
    • Añade el aceite de oliva a la mezcla de levadura y agua.
    • Incorpora los ingredientes líquidos a la mezcla de harina y amasa hasta obtener una masa homogénea y elástica. Si la masa está muy pegajosa, añade un poco más de harina.
    • Cubre el bol con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
  2. Preparar la salsa:
    • En una sartén, calienta el aceite de oliva y añade el ajo picado. Sofríe hasta que el ajo esté dorado.
    • Agrega el puré de tomate, el orégano, la sal y la pimienta. Cocina a fuego lento durante 15 minutos, removiendo ocasionalmente. Reserva.
  3. Montar las pizzas:
    • Precalienta el horno a 220°C (428°F).
    • Divide la masa en dos partes iguales. Estira cada parte sobre una superficie enharinada hasta obtener la forma deseada.
    • Coloca la masa estirada en bandejas para pizza o sobre papel de horno.
    • Extiende una capa de salsa de tomate sobre cada base de pizza.
    • Espolvorea la mozzarella rallada uniformemente sobre la salsa.
    • Distribuye las rodajas de salame o longaniza, las rodajas de tomate y las aceitunas sobre la mozzarella.
  4. Hornear:
    • Hornea cada pizza en el horno precalentado durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes estén dorados y el queso esté burbujeante y ligeramente dorado.
    • Retira del horno y deja reposar durante unos minutos antes de cortar y servir.

Consejos

  • Variedad de Ingredientes: Puedes personalizar tu pizza con los ingredientes que más te gusten. Algunas opciones deliciosas incluyen champiñones, pimientos, cebolla, jamón, piña, o anchoas.
  • Opciones Vegetarianas: Si prefieres una pizza vegetariana, reemplaza el salame o longaniza con espinacas frescas, corazones de alcachofa, o calabacines en rodajas.
  • Mejora tu salsa: Añade albahaca fresca o una pizca de azúcar a la salsa de tomate para darle un toque especial.

Disfrutá de estas pizzas caseras y experimentá con diferentes ingredientes para encontrar tu combinación perfecta.

Con esta receta, tendrás una base sólida para crear las pizzas más deliciosas en la comodidad de tu hogar. ¡Buen provecho!

Continúa en la siguiente página

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