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Mi marido convirtió nuestra noche de bodas en un desastre – Historia del día
Regresamos a la extensa propiedad de Scott al día siguiente con Ella y comenzamos una vida con ella como si algo se hubiera decidido la noche anterior. Me sentí impotente y no sabía qué debía hacer.
Una noche, mientras sostenía a Ella en brazos, busqué respuestas sobre el pasado de Scott y su media hermana, Maya. “Scott, si tú y tu familia han cortado los lazos con tu media hermana, ¿por qué insistir en criar a su bebé?”, le pregunté.
La renuencia de Scott a responder me hizo enojar.
“Pero ella es la madre de Ella, ¿no? ¿Qué más sabes de ella?”, insistí más enojado.

“Everly, ya no se trata de Maya. Se trata de Ella. Ella no tiene nada que ver con nada de esto. Y no tiene a nadie más que a nosotros”, dijo Scott finalmente.
Le pregunté por el padre de Ella, pero se negó a hablar conmigo.
Unas semanas más tarde, la curiosidad me llevó a la oficina de Scott mientras él estaba fuera por trabajo. Descubrí una fotografía en su escritorio que contradecía todo lo que me había dicho anteriormente. Era una foto de Scott, aparentemente feliz y cercano a una mujer embarazada, potencialmente Maya.
Cuando Scott entró a la casa esa misma noche, su sonrisa se desvaneció cuando notó mi expresión severa. “Everly, ¿qué pasa?”, Preguntó con voz llena de preocupación.

Levanté la foto, mi voz era tranquila pero fría. “Explícame eso, Scott. Y esta vez quiero la verdad. Me dijiste que tú y tu hermana habían perdido el contacto. Pero esta foto dice lo contrario”.
El intento de Scott de responder sólo alimentó mi frustración.
“¡No más mentiras, Scott! Esta foto te muestra con una mujer embarazada, sonriente y feliz. ¿Cómo puedes fingir distanciamiento?”, grité.
Suspiró y se reclinó en el sofá. “Está bien, tienes razón. Esa es Maya, la madre de Ella. Aunque mi familia cortó lazos con ella, yo solía conocerla en secreto… y ayudarla”, admitió.
“¿Por qué ocultarlo? ¿Por qué me mentiste?”
