1. Favorece la salud del corazón:
Las grasas monoinsaturadas del aceite de oliva ayudan a reducir el colesterol malo y a elevar el bueno. Junto con la vitamina C del limón, esta mezcla estimula la circulación y ayuda a mantener las arterias sanas.
2. Alivia las molestias articulares:
Una cucharada cada mañana es un remedio clásico para el dolor y la rigidez articular. Sus efectos antiinflamatorios pueden aliviar las molestias causadas por la artritis u otras afecciones articulares crónicas.
3. Ayuda con la digestión:
Esta mezcla lubrica suavemente el tracto digestivo, facilitando el procesamiento de las comidas y la eliminación de desechos. Si sufres de estreñimiento, este sencillo ritual matutino puede ayudarte a regularizar tu digestión.
4. Promueve la desintoxicación y el apoyo al hígado:
¿Te sientes cansado o hinchado? El limón y el aceite de oliva ayudan a activar el hígado y la vesícula biliar, apoyando el proceso natural de limpieza del cuerpo y eliminando las toxinas acumuladas.
5. Propiedades antibacterianas naturales:
Los estudios demuestran que el aceite de oliva puede combatir bacterias dañinas en el intestino, como la Salmonella, ayudando a proteger el sistema digestivo.
Cómo utilizar
Tome una cucharada de aceite de oliva virgen extra mezclado con zumo de limón fresco a primera hora de la mañana en ayunas. Para algunos, un vaso diario de agua tibia con esta mezcla resulta aún más refrescante.
Con el tiempo, este sencillo hábito puede contribuir a una mejor digestión, mayor comodidad en las articulaciones y una sensación de mayor ligereza y energía.
ADVERTISEMENT