Instrucciones:
Congela las frutas previamente cortadas en trozos pequeños. Puedes usar una sola fruta o una mezcla de varias.
Coloca las frutas congeladas en una licuadora o procesador de alimentos.
Agrega el yogur o la leche a las frutas. Si prefieres un helado más cremoso, puedes agregar más yogur o leche.
Agrega la miel o el jarabe de arce según tu preferencia de dulzura. Si las frutas están bien maduras, es posible que no necesites añadir endulzantes adicionales.
Opcionalmente, agrega unas gotas de esencia de vainilla para dar un toque de sabor adicional.
Licúa la mezcla hasta que obtengas una textura suave y cremosa. Puedes detenerte y raspar los lados de la licuadora o procesador de alimentos para asegurarte de que todos los ingredientes estén bien incorporados.
Vierte la mezcla en un recipiente apto para congelador.
Congela la mezcla durante al menos 4 horas o hasta que adquiera la consistencia de helado.
¡Y listo! Tienes un helado de fruta casero y saludable. Esta receta es versátil, así que siéntete libre de experimentar con diferentes combinaciones de frutas para crear tus propios sabores personalizados. ¡Disfruta de este delicioso y nutritivo helado!
ADVERTISEMENT
